Capítulo 11 Imagina Niall Horan

L: Con que revisando el contrato... Creo que estás revisando otra cosa. J: Esto... L: Ahora lo entiendo todo. Me has estado engañando todo este tiempo. Me di la vuelta y volví con Irene. L: ¿Podemos irnos? I: Claro. Nos fuimos a casa de Josh. L: ¿Me ayudas a recoger todas mis cosas? I: Claro. Pero, ¿dónde vas a ir? Si quieres puedes quedarte en mi casa. L: No hace falta. Ya tengo una idea. Además tengo que arregla un par de cosas. Pero gracias de todas formas cielo. Irene y yo recogimos todas las cosas y nos despedimos. Pedí un taxi y me dirigí a aquella casa en la que tenía pensado quedarme un tiempo. Llamé a la puerta y Harry me abrió mientras me miraba con su cara de recién levantado. Tenía el torso desnudo y el pelo alborotado.

L: Buenos días dormilón. Ha: Hola Laura. ¿Qué haces aquí con todas esas maletas? L: He roto con Josh y me he ido de casa. H: Pasa. Entré con todas las maletas y los dos nos sentamos para hablar en el sofá. Ha: ¿Qué ha pasado? La: Josh me dijo que había quedado con su representante. Entonces yo aproveché para quedar con una amiga. Y de pronto, hemos visto cómo Josh estaba besando a otra chica. Y yo... Yo no sabía a dónde ir... Así que he venido aquí... Pero si molesto, me voy... Ha: No digas eso Laura. L: Pero, sinceramente, me alegro de haber roto con él. Ha: ¿Por qué? L: Porque ahora puedo hacer cosas que no podía hacer antes sin preocuparme. Ha: ¿Como cuál? Besé a Harry como nunca había besado a nadie. El beso conllevaba pasión, odio, y sobre todo, sobre todo tenía alegría. L: Cosas como esta. Harry me miró a los ojos. Ha: ¿Estás segura? La: Sí.Esta vez fue Harry el que me besó. A mitad del beso, noté como Harry sonreía, lo que me hizo sonreír a mí también. Ha: Voy a preparar café. ¿Quieres? L: Sí, por favor. Hizo el café y nos lo tomamos mientras hablábamos. L: Voy a recogerlo todo. Fui a la cocina y metí las tazas y los platos en el lavavajillas. Noté unas manos sobre mi cintura que me giraron. Tenía a Harry en frente de mí que me sonreía de oreja a oreja.

L: Hola Harold. Ha: Hola preciosa. Quería preguntarte una cosa. L: Claro. Dime. Ha: ¿Qui-quieres estar conmigo? L: Claro. No me iré.-Le dije con una sonrisa en mi cara. Ha: No. No me refiero a eso. Me refiero a estar juntos. Como una pareja. Ya sabes, como novios. Le sonreí tímidamente. Asentí con la cabeza. Harry depositó un leve beso sobre mis labios. L: Estaré encantada de serlo. Mis palabras hicieron que una sonrisa se formara en la dulce cara de Harry. Ha: ¿Sabes una cosa? L: ¿El qué? Ha: He estado esperando este momento mucho tiempo. Te he estado deseando en secreto. Por las noches pensaba en ti y en cómo sería observarte dormir a mi lado por las noches. L: Pues ahora lo podrás averiguar. Ha: También pensaba en cómo seria el... L: ¿El qué? Ha: El cómo sería hacerte el amor. Mis mejillas se volvieron de un color rojizo que hicieron que Harry soltara una risita. L: Eso también puedes hacerlo ahora. Le sonreí pícaramente mientras depositaba un beso en su mejilla. Ha: Esa parte me gusta. Harry se mordió el labio de esa forma tan sensual que me hacía perder la cabeza. Ahora mis ojos, antes fijos en sus carnosos labios, ahora estaban fijos en sus ojos. Sus preciosos ojos verdes en los que me perdía.

Harry me besó, lo que me hizo volver a la tierra. Sus labios atraparon los míos en un beso apasionado. Harry me cogió por las caderas y me sentó en de la encimera de la cocina. Sus labios recorrían mi cuello dejando besos en él. Mientras él rozaba mi piel con sus carnosos labios, yo acariciaba su pecho desnudo. Rocé cada centímetro de su fuerte pecho con mis dedos. Harry me cogió y me llevó hasta su habitación, mientras intentaba sacar mi camiseta sin éxito. Me dejó en la cama tendida, tumbándose él encima sin apoyar todo su peso sobre mí. Me quitó la camiseta. 

Bajé sus pantalones hasta que acabaron en el suelo junto a mi camiseta. Después, él hizo lo mismo con mis shorts. Ahora ambos estábamos en ropa interior. Harry se levantó un poco y abrió un cajón de su mesilla de noche. Ha: Mierda. L: ¿Qué pasa? Ha: ¿Tomas la píldora? L: Sí. ¿Por? Ha: No tengo preservativos. Y preguntaba eso para... L: Vale. Ha: En tal caso, sigamos por donde íbamos. Le dediqué una sonrisa antes de besar sus labios. Mi sujetador fue desabrochado y tirado al suelo con el resto de las prendas. Harry fue bajando sus manos hasta coger mis braguitas. Yo puse mis manos sobre las suyas y las llevé hasta mi cuello. No quería que eso pasara todavía. Entonces fue cuando mis manos fueron hasta la goma de sus calzoncillos bajándolos hasta llegar al suelo. Harry me miró con el ceño fruncido. Ha: ¿Por qué tú puedes y yo no? L: Las mujeres primero. Llevé sus manos hasta mis braguitas. L: Ahora sí. Harry las bajó dejándome completamente desnuda ante su vista. Harry me besó antes de entrar dentro de mí haciéndome gemir. Harry se movía dentro de mí provocándome placer. Yo dejaba besos en sus labios mientras que ambos gemíamos de placer. Los dos nos deseábamos el uno al otro. Estábamos los dos juntos en un cuerpo solo. Cuando los dos llegamos al orgasmo, cansados, nos tumbamos el uno al lado del otro. El apoyando su cabeza sobre mi tripa, y yo acariciando su cabeza hasta quedarnos dormidos.